¿Qué es la Fascitis Plantar?
La fascitis plantar es una patología muy dolorosa que cursa con inflamación del tejido conectivo que sostiene el arco del pie, la fascia plantar.
Esta inflamación puede surgir debido a:
- Biomecánica anormal, exceso de arco plantar o pie plano
- Impacto de repetición, caminar cuesta abajo o sobre superficies desiguales
- Sobrepeso
- Elasticidad deficiente en tríceps sural (gemelos y sóleo): movilidad reducida de tobillo y exceso de tensión
- Calzado inadeacuado con agarre deficiente, mal soporte de arco plantar o suelas inestables/blandas
Los síntomas más comunes son dolor y rigidez en el arco del pie y/o talón e inflamación en la planta del pie.
Especialmente al levantarse por la mañana, después de pasar tiempo de pie o al retomar la marcha después del reposo o tras actividad intensa (andar durante mucho tiempo, correr, deportes de impacto, …)
Si no se atiende a la patología puede generar lesiones asociadas en miembros inferiores (que alteran la biomecánica de todo el cuerpo), e incluso, dar lugar a un espolón calcáneo (crecimiento óseo en el talón) que puede contribuir al malestar en el área afectada y cronificar la lesión.
¿Cuánto tardaré en recuperarme?
La duración de la recuperación de la fascitis plantar depende de la gravedad de la lesión, del inicio de la rehabilitación y de la adherencia al tratamiento.
En general, se estima que la mayoría de las personas experimentan alivio significativo dentro de seis meses con tratamiento adecuado. En los casos más leves que comienzan pronto la recuperación se necesitan pocas sesiones, en los casos más graves requiere más tiempo e implicación.
Es fundamental entender que cada individuo es único y la recuperación puede ser más rápida o prolongada según las circunstancias.
¿En qué consiste el tratamiento de fisioterapia?
La fisioterapia desempeña un papel crucial en el manejo de la fascitis plantar para aliviar el dolor y mejorar la función dependiendo de la sintomatología y condición de cada paciente.
- Terapia manual: Mediante la manipulación del pie se reduce la tensión en la fascia plantar, lo que recupera la movilidad, mejora la flexibilidad del tejido y alivia el dolor.
- Ejercicio terapéutico: Se diseña un programa específico de ejercicios de fortalecimiento de los músculos y tendones, movilidad articular y flexibilidad de la fascia plantar.
- Asesoramiento sobre calzado y biomecánica: Se analiza la pisada y hábitos posturales para asesorar de manera individualizada sobre el calzado adecuado y corrección de patrones de marcha o posturas que puedan contribuir a la fascitis plantar.
Dependiendo del caso se puede optar por tratamientos más complejos que requieran vendajes funcionales, termoterapia o terapia invasiva (ondas de choque, punción seca, electrolisis percutánea,…)
O en última instancia, plantillas que alivien la fascia plantar o inyecciones de corticosteroides (aunque no se recomiendan de manera repetida ya que puede debilitar el tendón)
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La fascitis plantar es dolorosa e incapacitante y en muchas ocasiones se puede perder la paciencia, ya que el reposo no mejora la sintomatología y la recuperación no siempre es lineal.
Si te encuentras lidiando con esta patología, recuerda que buscar ayuda temprana y seguir un plan de tratamiento personalizado es la clave para salir de ella y volver a disfrutar de desplazarte y vivir con unos pies sanos.